El presidente Santiago Peña, anunció que ya no mantiene contacto con el embajador de EE. UU., Marc Ostfield, desde que solicitó la aceleración de su salida del país. El mandatario afirmó que la comunicación con el gobierno estadounidense se realiza directamente, sin necesidad del embajador, y destacó que la relación entre Paraguay y EE. UU. sigue siendo sólida a pesar de esta ruptura.
Peña expresó que Ostfield ha causado un “daño tremendo” a las relaciones bilaterales y que su decisión de evitar al embajador se debió a su percepción de que este estaba perjudicando la relación entre ambos países. Sin embargo, el presidente aclaró que no lo declaró persona non grata ni exigió su salida, considerando que tal acción sería más perjudicial para Paraguay que para Ostfield.
Además, Peña mencionó un creciente sentimiento antiamericano en Paraguay, atribuyéndolo a la actuación del embajador, aunque afirmó que su país históricamente ha mantenido buenas relaciones con EE. UU. El mandatario espera que las relaciones mejoren con la próxima administración de Donald Trump, quien asumirá el cargo el 20 de enero
