Un presunto feminicidio ocurrió en el distrito de Abaí, en el Departamento de Caazapá, donde la joven indígena de 20 años, Celina Martínez Ojeda, fue encontrada muerta en un campo de cultivo. La víctima presentaba una herida profunda en el cuello, aparentemente causada por un arma blanca. Se sospecha que el responsable del crimen es su ex pareja, el suboficial de policía Éver Mendoza Giménez, de 25 años, quien actualmente está prófugo.
El hecho ocurrió el lunes, y el cuerpo de la joven fue encontrado a unos 800 metros de un camino principal en una zona rural. La Fiscalía, a cargo del fiscal José Núñez, inició la investigación, y se descubrió que el sospechoso ya tenía antecedentes por violencia familiar y medidas de restricción contra la víctima, como la prohibición de acercarse a ella o consumir alcohol.
El suboficial Mendoza Giménez, que presta servicio en la Comisaría 9.ª de Tupãrenda, habría informado por WhatsApp a un compañero de su trabajo sobre el hallazgo del cadáver. La Policía Nacional aún investiga las circunstancias del crimen, pero el sospechoso permanece prófugo, con una orden de captura en su contra.