El fiscal Francisco Martínez imputó al padre de un niño de seis años que fue internado en el Hospital Regional de Encarnación por intoxicación alcohólica. Se sospecha que el padre le dio caña al menor.
Durante la detención, el padre se encontraba en estado de ebriedad, con un nivel de alcohol en sangre de 1.136.
La imputación se dirige solo al padre, ya que la madre había solicitado ayuda a su hermana, lo que la exime de responsabilidad. El fiscal mencionó que la pena por este tipo de delito puede alcanzar hasta tres años.
Aunque no se encontraron signos de violencia física o sexual en el niño, se investiga el contexto familiar, dado que el padre tiene cinco hijos y vive en condiciones precarias. El niño podría recibir el alta médica pronto, dependiendo de su evolución.
