El comisario Juan Ferreira Méndez, jefe de la Comisaría 7ma de Eusebio Ayala, fue detenido tras un allanamiento fiscal por denuncias de familiares de jóvenes adictos.
Según la fiscala María Luis González, el comisario solicitaba dinero a los familiares, ofreciendo el recinto policial como “centro de rehabilitación”. Si los familiares no podían pagar, el comisario hacía figurar un hecho punible y lo comunicaba al Ministerio Público.
Durante el allanamiento, se incautaron documentos, cámaras de circuito cerrado y se fiscalizó el calabozo de la comisaría.
La detención del comisario se produjo luego de que familiares de adictos denunciaran que estaban siendo coaccionados por el jefe policial para no derivar los casos de sus hijos al Ministerio Público.