Las autoridades municipales de Asunción, a través de la Dirección de Defensa del Consumidor, suspendieron las actividades de dos locales que funcionaban como frigorífico y matadería en la zona de Tablada.
La medida se tomó debido a que estos establecimientos no cumplían con las condiciones sanitarias y de procesamiento de insumos requeridas, además de generar contaminación al ambiente.
Uno de los locales, que se dedicaba a pulverizar huesos para fabricar alimentos para animales, se encontraba funcionando sobre el arroyo Yvyra’i, lo cual no está permitido para un frigorífico.
Tras varias notificaciones y verificaciones, los inspectores procedieron a labrar actas y finalmente a suspender las actividades de estos locales clandestinos.
Adicionalmente, se impondrán multas que pueden ir de 100 a 300 jornales, las cuales serán elevadas al Juzgado de Faltas y cargadas en las cuentas catastrales correspondientes.