Una investigación fue iniciada por el Ministerio de Justicia a raíz del traslado irregular de dos condenados por narcotráfico del penal de Tacumbú al de Villarrica. Se trata de Flaviano Giménez y su hijo Flavio Junior Giménez Spaini, quienes se mudaron de prisión entre el viernes y el sábado pasado.
El martes se retrotrajo la acción, disponiéndose el regreso de ambos a la cárcel de Tacumbú.
“Tomé conocimiento hace un par de días por lo que dicté una resolución mediante la cual dictaminé para que ningún traslado se haga sin que antes sea autorizado por la máxima autoridad o por el viceministro de Política Criminal”, señaló el ministro Rodrigo Nicora.
Aparte de solicitar los antecedentes de los condenados, el titular de la cartera pidió la nómina de personas que acompañó el traslado y el número del vehículo utilizado con la finalidad de deslindar responsabilidades o identificar a los responsables que tuvieron participación en el hecho.
A través del director de Comunicaciones del Ministerio Público, Anibal Emery, se dio a conocer la versión de que el director del penal de Tacumbú, Luis Esquivel, recibido G. 50 millones. Hasta el momento, esto está bajo investigación.
En cuanto a la nota de traslado, Nicora confirmó que un interno la redactó. Este mismo también habría firmado el escrito “por ausencia” del director y estampado su sello.
De igual manera, investigan el posible pago de G. 500.000 a un comisario de la zona para que no asigne escoltas al móvil que trasladó a los reclusos a la cárcel de Villarrica.
