El asistente fiscal de Villa Hayes, Antonio Ramón Petters Paredes, y el abogado Raúl Adriano Cardozo Benítez fueron imputados por el fiscal Luis Piñánez por presunto tráfico de influencia y resistencia en un caso de coima.
La investigación se inició a raíz de una denuncia de una mujer identificada como Andrea Soledad Díaz Escobar, cuyo marido fue acusado de violencia familiar.
La pareja contrató al abogado Cardozo, quien supuestamente les informó que Petters aparentemente requería un pago de G. 5 millones para evitar la imputación y archivar la causa.
Durante una entrega vigilada, los sospechosos fueron capturados después de intentar huir de los agentes policiales. El fiscal Piñánez solicitó la prisión preventiva para ambos imputados.