El exdirector de la Penitenciaría Nacional de Tacumbú, Julio Balbuena Añazco, y otro funcionario del penal han sido imputados por la Fiscalía por la liberación de un violador serial en abril del año pasado.
El violador, llamado Luis Héctor Morínigo Cantero, tenía una condena de 30 años por coacción sexual y robo agravado, pero fue liberado antes de cumplir su pena y posteriormente recapturado en Argentina.
Según la investigación, el funcionario penitenciario Héctor Darío Franco Vitale informó que no había condenas pendientes en el expediente de Morínigo, y Añazco aprobó su traslado y liberación.
Sin embargo, más tarde se descubrió que Morínigo tenía una condena adicional que aún no había sido cumplida, lo cual impedía su liberación y expulsión del país. Los acusados argumentan que no tenían conocimiento de este expediente adicional y, por lo tanto, siguieron el proceso de liberación.
Morínigo fue finalmente recapturado en julio del año pasado en Argentina, después de que se emitió una orden de arresto a través de Interpol.