Gregorio Ramón “Papo” Morales Macchi, acusado del asesinato del joven Robert Fabián Marín, logró suspender nuevamente el juicio oral y público al presentar una recusación contra el Tribunal de Sentencia.
Morales ingresó a la sala de juicios esposado y en silla de ruedas y solicitó que el abogado Carlos Antonio Caballero asuma su defensa, mientras que el letrado pidió una nueva evaluación psicológica al acusado.
El Tribunal rechazó la solicitud, por lo que los magistrados fueron recusados y la diligencia quedó suspendida hasta que el Tribunal de Apelación resuelva la cuestión.
La pareja se Morales, Cinthia Ramona Ojeda Burgos, también enfrenta cargos por su presunta complicidad en el hecho de homicidio doloso, omisión de auxilio, omisión de aviso de hecho punible y frustración de la persecución y ejecución penal.
Marín fue asesinado a tiros en una vía pública del barrio San Pablo el 23 de noviembre de 2020. De acuerdo con la acusación, Morales le disparó tras un encuentro en un local nocturno con la presencia de Ojeda. Tras el homicidio, el acusado y su pareja fueron detenidos en un motel de Lambaré, gracias al testimonio de un amigo de la familia Morales.