La Corte Interamericana de Derechos Humanos (IDH) condenó a Paraguay por detención ilegal, tortura y violación de garantías judiciales en el caso del oficial inspector Jorge López Sosa, quien fue golpeado y maltratado por miembros de la Policía Nacional durante un intento de golpe de Estado en 2000, cuando Walter Bower se desempeñaba como ministro del Interior.
El Estado deberá promover investigaciones para determinar, juzgar y sancionar a los responsables y diseñar programas de capacitación para jueces y fiscales.
Además, deberá pagar una indemnización de USD 50.000 al policía por daños materiales y rendir informes sobre el cumplimiento de la sentencia en un plazo de un año.