El fiscal Julio Ortiz encabezó ayer sábado un allanamiento en la vivienda del exfiscal fallecido Javier Ibarra, en la ciudad de San Lorenzo. El agente señala que la hipótesis principal es la de un presunto homicidio, ya que se efectuaron dos disparos y falta un proyectil, además de que la supuesta arma homicida tampoco está en el lugar. Hasta el momento, no tienen pistas que pudieran conducir al paradero del supuesto autor y el domicilio no cuenta cámaras de seguridad.
“Posiblemente el autor del hecho utilizó el arma de bolsillo que tenía Javier Ibarra. Según familiares y sus conocidos, decían que él tenía un arma pequeña (…) El arma ya no se encontró en el lugar. Hemos movido pieza por pieza y en el patio para ver si el posible autor lo tiró pero eso no sucedió”, declaró Ortiz ante los medios de prensa.
Dos teléfonos celulares fueron incautados en el sitio, uno que era utilizado por Ibarra y otro que tenía el número al dorso y ambos serán llevados al laboratorio para su análisis, para determinar con quién se comunicó el fallecido antes de llegar a su domicilio. “Uno de ellos está codificado. Evidentemente, tuvo que él haberse comunicado con la persona, en la hipótesis de que haya sido homicidio”, dijo el fiscal Ortiz.
De acuerdo a la autopsia, la causa de muerte de Ibarra sería traumatismo de craneoencefálico severo por herida de proyectil de arma de fuego y los disparos se habrían realizado con un arma automática aparentemente del calibre 22. El exfiscal Antidrogas y exviceministro de Seguridad Interna recibió los dos impactos de bala en la cabeza .
