El presidente de la República, Mario Abdo Benítez, solicitó a los demás integrantes del grupo guerrillero del Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), que depongan las armas y se sometan a la justicia, a raíz de la caída de su líder, Osvaldo Villalba.
Abdo Benítez se trasladó hasta la sede del Comando de Operaciones de Defensa Interna CODI-FTC, ubicado en la localidad de Arroyito, departamento de Concepción, junto al ministro del Interior, Federico González.
En conferencia de prensa, el jefe de Estado lamentó que dos integrantes de los pueblos originarios fueran “asesinados por este grupo” y otro más quedase herido. “Esta no es la forma de luchar por lo que uno piensa, por los ideales que defienden”, resaltó.
En esa misma línea, el mandatario ofreció a quienes depongan las armas “todas las garantías” de que serán sometido al debido proceso, e hizo un llamado a la paz y a que “estos hechos de violencia queden atrás”.