El juez Guillermo Riveros Florentín sentenció que el Instituto de Previsión Social (IPS) y dos médicas, identificadas como Rocío Rienzi y Teodora Mendoza, deberán pagar en total G. 3.700 millones por daño moral y lucro cesante a la madre de una niña que quedó con ceguera irreversible, tras una presunta negligencia médica en la previsional. La evidencia principal presentada fue el expediente clínico de la menor.
La sentencia refiere que las doctoras y el IPS deben abonar más de G. 946 millones en concepto de indemnización, más los intereses de G. 14 millones mensuales desde septiembre del año 2006, cuando se inició la demanda.
El caso se remonta al 1 de agosto del año 2004, cuando la demandante Lourdes Coronel dio a luz a una niña que fue diagnosticada con retinopatía del prematuro grado I pero que nunca fue debidamente tratada por las profesionales condenadas, lo que derivó en la posterior ceguera total de la menor, quien actualmente tiene 16 años.
El juez Riveros calificó la conducta de las doctoras como “culposa y negligente” y cuestionó que la niña no recibió ni siquiera exámenes periódicos tras ser diagnosticada. La jueza Luz Marlene Ruíz Díaz ya había dictado una sentencia del caso en el 2018, que luego fue anulada por el Tribunal de Apelación.
