El Servicio Nacional de Saneamiento Ambiental (Senasa) adquirió tres camiones cisternas y 200 reservorios de fibra de vidrio, que serán destinadas a paliar las necesidades agua potable de las comunidades del Chaco. Para la región Oriental alista máquinas perforadoras y contratos para realizar perforaciones a pozos.
La directora de Senasa, Sara López, sostuvo que ante la situación de sequía que afecta al país, se encuentra aplicando un plan de contingencia para proveer agua potable a las comunidades. La zona más resentida por la anomalía climatológica es el Chaco paraguayo, que a su vez es más afectada por causa de su densidad territorial y la escasez de agua dulce.
López explicó que en la región Occidental o Chaco no se cuenta casi con agua dulce y se debe acumular el agua de lluvia en los aljibes, pero como actualmente hay una sequía la situación se vuelve más crítica.
«Ahora nosotros adquirimos tres camiones cisternas uno de 10.000, 20.000 y 30.000 metros cúbicos que van a estar puestos en Filadelfia, prestos para ser destinados a la zona del Chaco y serán apoyo para los trabajos de la Secretaría de Emergencia Nacional», explicó.
Agregó que, para dar una respuesta más inmediata, el Senasa adquirió 200 reservorios de fibra de vidrio que serán distribuidos directamente a los pobladores de las zonas afectadas. «Se entregará, según la necesidad, ya que hay que actuar de forma inmediata, ya no hay tiempo de relevar datos», refirió.
En cuanto a la situación en la región Oriental, refirió que la situación es totalmente diferente por la disponibilidad de agua dulce. Sin embargo, por causa de la sequía, también existen problemas para la perforación de los pozos profundos.
«Cuando no llueve eso se nota en el caudal de los pozos profundos, para ello estamos alistando máquinas perforadoras y contratos para perforar pozos. Todas las comunidades se ven afectadas en la cantidad de agua para sus comunidades esto en la región Oriental», manifestó.
Para hacer frente a esta situación, López aseguró que funcionarios a su cargo están trabajando con las gobernaciones y municipios en la racionalización del uso del agua potable ya que la necesidad «es muy grande», dijo finalmente la funcionaria dependiente de la cartera de Salud Pública.
