A raíz de una denuncia publicada en un medio de comunicación nacional, la Superintendencia de Salud a través de su director jurídico Freddy López actuó de oficio, procediendo a la clausura provisoria de la funeraria Pueblo Mío.
La denuncia realizada por familiares de una persona fallecida en el Ineram señalaba que debido a que estos no abonaron la totalidad de lo requerido por el servicio fúnebre, personal de la empresa Pueblo Mío retiró del cementerio de Lambaré el ataúd con el cadáver de su familiar adentro, llevándoselo nuevamente hasta las instalaciones de la empresa, y que recién aproximadamente a las 11 de la noche, reunido el monto de G. 4 millones pudieron retirar al difunto y darle sepultura.
“Es una cuestión inhumana, lamentable desde todo punto de vista y, por ello, además de que este establecimiento no se encuentra inscripto en la Superintendencia ni habilitado por el Departamento de Control de Profesiones y Afines es que actuamos de oficio y clausuramos el local”, señaló el abogado Freddy López.
Durante la actuación del cese de actividades temporal del establecimiento, fue colocado el rótulo de clausurado en la puerta principal que debe permanecer adherido hasta que se obtenga la habilitación correspondiente, y comunicado al propietario Cristian Marecos los motivos de clausura y los tramites que debe realizar para hacer funcionar regularmente y bajo los estándares legales a su empresa.
También se notificó que en caso de incurrir en una apertura ilegal del local y ser encontrado en flagrancia se procederá a una multa y a un sumario para el cierre definitivo del mismo.
Situación de las casas funerarias
Las funerarias forman parte de las Entidades Prestadoras de Servicios de Salud y por lo tanto el ente rector que las habilita y registra es el Ministerio de Salud.
Según comentó López, en nuestro país actualmente se tiene conocimiento de la existencia de 79 casas funerarias y de que solo seis están habilitadas por el Ministerio de Salud y que el resto trabaja de forma irregular. Algo llamativo en palabras del abogado es que en la ciudad de Capiatá se conocen alrededor de 30 funerarias sin habilitación.