La Subsecretaría de Estado de Tributación (SET) descubrió que empresas, presuntamente, fantasmas habrían vendido facturas apócrifas a unos 4.200 contribuyentes a fin de cometer fraude fiscal.
Tributación hizo la denuncia ante la Fiscalía tras detectar que los domicilios declarados correspondían a patios baldíos, no pagaban impuesto ya que declaraban crédito fiscal a su favor, y las 52 firmas declaraban a la misma hora y desde la misma computadora.
Las mismas serían compañías fantasmas que formaban parte de un esquema de evasión de impuestos y que ya fueron desarticuladas, tras un allanamiento de la Fiscalía.