Durante una jornada de trabajo en varios distritos del departamento de Caaguazú, el presidente de la República Mario Abdo Benítez inauguró varias obras. Allí, agradeció al Congreso Nacional por el acompañamiento constante para el impulso de las obras públicas, a través de los créditos y recordó que la nación está muy por encima de los intereses partidarios, por lo que pidió a la clase política dejar de lado las vanidades y trabajar para que el pueblo sienta la mano responsable y solidaria de sus gobernantes.
“La política tiene que estar al servicio de la gente, no al servicio de los políticos. Es el momento de dejar de lado las diferencias y encontrar un rápido alivio a nuestra economía del país, esa es la responsabilidad que tenemos los que estamos al frente de la Nación, senadores, diputados y la clase política en general”, expresó el mandatario y agregó: “Hasta que me sangre la garganta voy hablar para que mi pueblo se reconcilie”.
Asimismo, realizó un recuento de las iniciativas desarrolladas durante su administración y destacó la gestión que vienen encarando sus ministros al frente de las diferentes instituciones. Sobre el punto, afirmó que el Gobierno está transformando la vida de la gente a pesar de los años difíciles, el primero de ellos caracterizado por los eventos climáticos y, el segundo, por la pandemia del coronavirus.
“Agradezco a todo este noble pueblo que ha asumido con tanta responsabilidad y ha permitido que el Paraguay sea un ejemplo ante el mundo. Este país pequeño con muchas asimetrías, a través de la voluntad y el compromiso es un ejemplo en el mundo y hemos salvado muchas vidas juntos”, expresó.
En ese orden, mencionó que la vida no se recupera pero la economía sí, alegando que este el momento de volver a pensar en el reinicio de las actividades laborales. Por eso, instó a aferrarse a los cuidados sanitarios para evitar la propagación del coronavirus y de ese modo cuidar el trabajo de la gente.
Dejar de lado los intereses para generar estabilidad
En otro momento, sostuvo que para crear fuentes de empleo se debe generar estabilidad y previsibilidad. Consideró que Paraguay tiene ventajas frente a los demás países de la región y prueba de ello son las previsiones de los organismos internacionales que lo ubican como uno de los países con menor impacto a raíz de la pandemia.
“Pero mucho de eso depende que nos pongamos de acuerdo los políticos, la política debe estar al servicio de la gente. Es momento de dejar de lado nuestras diferencias, que actúen las instituciones pero nosotros debemos reencontrarnos para buscar un rápido alivio a la economía de nuestro país”, expresó.
Por otro lado, aseguró que el país merece “renunciamientos” y por eso hizo un llamado a encontrar los puntos de coincidencia y trabajar para el pueblo sienta la mano responsable y solidaria de sus gobernantes. Igualmente, refirió que su rol como presidente es crear el ambiente adecuado para atraer las inversiones extranjeras y remarcó que seguirá dialogando con todos los sectores para reconciliar a la nación y generar una gran transformación.
“Tenemos un enorme desafío donde tenemos que romper paradigmas porque vivimos tiempos extraordinarios. Vamos a necesitar medidas extraordinarias y por eso pido el apoyo y el trabajo coordinado de los diferentes sectores políticos”, enfatizó.
Aseguró que pese a la pandemia las obras están continuando con su dinámica normal por lo que se avizoró grandes años de crecimiento para el Paraguay, una vez que se recupere de la crisis generada por la COVID-19.