En el asentamiento Montserrat de Itauguá, una familia fue desalojada de forma violenta, incluso con palos y garrotes por parte de una persona que dijo ser el propietario del terreno.
El agresor llegó hasta el lugar en compañía de supuestos oficiales de policía vestidos de civil, todos portaban machetes y palos en mano para realizar este desalojo irregular.
La familia afectada también se defendió respondiendo a los golpes de los agresores. Fue solicitada la intervención del Ministerio Público.