La catedral Espíritu Santo funciona actualmente como un depósito de alimentos. El templo religioso es usado como lugar de almacenamiento para son guardar los vivieres recolectados durante la maratón solidaria realizada hace días en la capital departamental
En la iglesia se pueden encontrar, bolsas cargadas de azúcar, aceite, fideo, panificados, leche y otros productos no perecederos ocupan actualmente los bancos de la catedral. Es así que la Catedral fue transformada para un gran almacén, teniendo en cuenta que las actividades de la iglesia están suspendidas, conforme a la cuarentena sanitaria decretada por el Gobierno con el fin de reducir la propagación del Covid-19
“Estamos acostumbrados a recibir a numerosas familias que venían a participar de las misas y esta vez convertimos la catedral en un depósito para montar los kits de alimentos que estaremos entregando a las familias más vulnerables”, comentó Humberto Vera, vicario de la Catedral .