Las autoridades en Islandia han declarado el estado de emergencia después de una serie de terremotos en el suroeste del país, que podrían indicar una posible erupción volcánica.
Como medida preventiva, se ha iniciado la evacuación de los habitantes de la zona afectada, incluyendo la ciudad de Gindavík, ubicada a 50 kilómetros al suroeste de la capital, Reikiavik.
El servicio meteorológico de Islandia reportó que hay indicios de un desplazamiento significativo de magma en el área cercana a Grindavík. Aunque no se puede determinar con certeza si el magma llegará a la superficie, los signos actuales son similares a los observados antes de la erupción volcánica que ocurrió en 2021.
De acuerdo con las autoridades, es probable que el magma tarde varios días en llegar a la superficie, basándose en la experiencia previa con el volcán Fagradalsfjall. Hasta el momento, se han registrado alrededor de 800 temblores en la zona afectada, de los cuales 9 fueron de una magnitud superior a 3.