El Senado de Chile dio media sanción el martes al proyecto de ley que reduce la jornada laboral semanal, de 45 a 40 horas, iniciativa que dejará al país junto a Ecuador como los dos únicos países en la región en tener esa extensión laboral.
El proyecto de ley ingresó en 2017 al Congreso, y fue aprobado en la Cámara Alta por 45 votos a favor, ninguno en contra y ninguna abstención.
De esta forma, en el plazo de un año la jornada laboral semanal será de 44 horas, disminuirá a 42 en el tercer año de aplicación de la ley y a 40 horas luego de cinco años.