Las elecciones presidenciales en Brasil mostraron una reñida confrontación entre los candidatos principales de cada sector político, el mismo abre camino a una segunda vuelta para el 30 de octubre. Al cierre de nuestra edición, con un 96% de las mesas escrutadas, Lula Da Silva obtenía una ventaja del casi 4% sobre Jair Bolsonaro, registrándose un porcentaje de votos del 47,72% para el izquierdista contra el 43, 81% del conservador.
El líder petista se ubicó a la cabeza del conteo con 56.978.680 de votos en su favor, mientras que el actual mandatario alcanzó los 51.002.914, en una jornada electoral que tuvo el 79% de asistencia, un total de 123.312.742 de votantes.
Después de que los resultados oficiales fueron anunciados, Lula manifestó una amplia confianza en que vencerá en la segunda vuelta: “Vamos a ganar, esto es solo una prórroga”, expresó. Por su parte, Bolsonaro, aceptó que los ciudadanos solicitan “un cambio”, pero sostuvo que un Gobierno de izquierda les daría a los brasileños “mucho que perder”.
Varios otros candidatos presidenciales estaban en la contienda, pero quedaron muy por detrás de los dos principales candidatos.
