El Congreso de Perú votó a favor de iniciar un juicio político contra el presidente Martín Vizcarra por segunda vez en dos meses, lo que aumenta la incertidumbre política para un país sumido en una profunda recesión y una devastadora pandemia. Vizcarra ya sobrevivió a su primer juicio político el 19 de setiembre, después de que solo 32 legisladores votaran por su destitución tras supuestamente intentar interferir en una investigación de corrupción contra miembros de su Gobierno.
El pasado lunes, el Congreso unicameral de la nación andina votó 60-40 a favor de admitir la moción de juicio político, un quórum superior a los 52 votos necesarios; mientras que 18 legisladores se abstuvieron.
El juicio político de Vizcarra se debatirá y votará el 9 de noviembre, una vez que el presidente o su abogado hayan presentado su defensa en la cámara de 130 escaños. Si la moción recibe 87 votos, será destituido del cargo y reemplazado por el presidente del Congreso hasta que se celebren elecciones.
Las acusaciones
Los fiscales están investigando acusaciones de que Vizcarra recibió 2,3 millones de soles en sobornos de compañías que construyeron proyectos de infraestructura en la región de Moquegua, donde fue gobernador entre 2011 y 2014. Los fiscales abrieron una investigación sobre Vizcarra el mes pasado en base a testimonios y documentos proporcionados por ejecutivos de las compañías constructoras que buscan un acuerdo de culpabilidad como parte de una investigación más amplia sobre sobornos. Él niega haber hecho algo malo.
Los procedimientos serán una distracción para ese Gobierno en momentos en que intenta apuntalar el crecimiento económico tras una contracción mundial. Perú también tiene el mayor número de muertes per cápita por COVID-19.