El candidato demócrata Joe Biden derrotó este sábado al presidente Donald Trump y será el 46º presidente de Estados Unidos, un país agriamente dividido, vapuleado por una devastadora pandemia y desgarrado por tensiones raciales y socioeconómicas.
La victoria se confirma luego de más de tres días de incertidumbre ya que las autoridades estuvieron demoradas al contar los votos depositados por correo. Biden necesitaba 270 votos del Colegio Electoral, que consiguió una vez se anotó el triunfo en Pensilvania.
Poco después del anuncio, Biden declaró que se siente “honrado” por la victoria electoral e hizo un llamado a la unidad nacional.
“Ahora que ha concluido la campaña, es hora de dejar atrás el rencor y la áspera y unirnos como nación”, dijo Biden en un comunicado.
“Somos los Estados Unidos de América”, continuó. “Nada es imposible para nosotros si lo hacemos unidos”.
Trump no admitió derrota alguna. En un comunicado, dijo que “nuestra campaña comenzará a presentar argumentos en los tribunales para garantizar que las leyes electorales sean respetadas y que el verdadero ganador de las elecciones asuma la presidencia”.
Biden, de 77 años, hizo campaña no tanto en base a promesas políticas o ideológicas sino a la idea de que había que forjar una coalición nacional para derrotar a Trump, al considerarlo una amenaza para la democracia norteamericana.
La estrategia resultó eficaz al anotarse triunfos en Michigan, Wisconsin y Pensilvania, antiguos baluartes demócratas que en el 2016, sorpresivamente, se inclinaron por Trump.