El nuevo coronavirus superó los dos millones de contagios en el mundo y provocó más de 127.000 muertos desde que apareció en diciembre, según el balance establecido por la universidad Johns Hopkins, en el que Estados Unidos lidera la lista de infectados, con más de 602.000. Por otro lado, al menos 470.000 personas se curaron de la enfermedad en el mundo.
La barrera del millón de infectados se había superado el 2 de abril pasado. Es decir que la cifra se duplicó en el mundo a lo largo de 12 días . En estas últimas jornadas, la enfermedad se golpeó con más fuerza en Nueva York, Italia, Francia, España y Gran Bretaña tras más de un mes de medidas para reducir su impacto.
La cantidad de muertos en Estados Unidos, que registró su primer deceso vinculado al virus a fines de febrero, asciende a más de 25.500. El país registra más de 602.000 contagios y se ubica primero entre los países con mayor cantidad de casos en el mundo .
Después de Estados Unidos, los países más afectados son Italia, con más de 21.000 muertos y 162.000 casos ; y España, con más de 18.000 muertos y 172.000 casos .
China -sin tener en cuenta Hong Kong y Macao-, donde la pandemia estalló a finales de diciembre, tiene un total de 83.300 personas contagiadas y 3345 muertos.
A las autoridades de todo el mundo les preocupa que suspender las cuarentenas y las medidas de distanciamiento social pudiera echar por tierra fácilmente los avances que se ganaron con esas medidas pensadas para reducir los contagios.
Aun así, algunas señales dejaron entrever que algunos países tenían los ojos puestos en la reactivación de la actividad . España permitió que algunos trabajadores regresaran a sus empleos, mientras que la región italiana del Véneto, duramente golpeada por la enfermedad, redujo sus restricciones de confinamiento. A su vez, gobernadores en ambas costas de Estados Unidos anunciaron que unirían fuerzas para establecer una reapertura coordinada en un momento dado, preparando el terreno para una posible fricción con el presidente Donald Trump, que dijo tener la última palabra para determinar cuándo y cómo reactivar al país.