El coronavirus originado en China tiene ahora su principal foco en Europa con más de 40.000 contagios. El virus se ha propagado a un centenar de países, entre ellos España, donde el número de infectados y fallecidos sube cada día. España está en estado de alarma, situación que supone el confinamiento de la población al menos durante 15 días.
El Gobierno Español, ha aprobado un plan de choque económico y social para hacer frente a la crisis del coronavirus en nuestro país.
El Banco de España ha advertido este viernes que la economía sufrirá “una perturbación sin precedentes”. Así lo ha dicho el gobernador, Pablo Hernández de Cos, en un comunicado. La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, ha abierto la puerta a la emisión de eurobonos para rescatar la economía “sin peros”. El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha asegurado esta mañana que, gracias a la “solidaridad” de los ciudadanos, “se conseguirá doblegar la curva del virus en muy breve”.
La ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, ha confirmado que el Gobierno ya está repatriando españoles. El Ejecutivo ordenó anoche el cierre de los hoteles y establecimientos similares, antes del próximo 26 de marzo. Más de medio millón de habitaciones y 1,1 millones de plazas quedarán vacías, al tiempo que en Madrid se han habilitado dos hoteles para aliviar los centros sanitarios.
El presidente de la Generalitat, Quim Torra, ha enviado cartas a los líderes europeos para criticar la gestión del Gobierno, después de que ayer asegurase en la BBC que Pedro Sánchez impedía el confinamiento en Cataluña.
En China, las buenas noticias se repiten por segundo día consecutivo, ya que no se han registrado nuevos contagios, aunque sí ha habido 39 casos importados. En España, el último balance arroja 18.074 contagiados, 939 ingresados en la UCI, 832 muertos y 1.107 altas, según el recuento de las comunidades y de Sanidad. Peores son los datos en Italia, donde los fallecimientos por el coronavirus subieron este jueves a 3.405, con lo que este país se convirtió en el primero del mundo en número de víctimas mortales, por delante de China (3.245).
El Pais
