La maquinización del brazo Aña Cuá, la obra de mayor envergadura en materia energética de la era democrática, sigue avanzando en forma sostenida gracias al fuerte impulso del Gobierno Nacional y al trabajo del equipo técnico de la EBY que dirige la ejecución del proyecto.
Los avances se hallan conforme a las previsiones estimadas en el programa de trabajo y a la fecha se encuentran en fase de terminación la construcción del obrador, los caminos de servicio y ataguías temporarias.
De acuerdo al cronograma del Contratista Civil y al Plan Maestro de ejecución del Proyecto, a inicios de marzo se estaría iniciando la primera fase de colocación de los hormigones en la zona de la Nave de Montaje de la futura Casa de Máquinas de la Central Aña Cuá.
Para tal efecto, se están ejecutando en forma permanente la excavación en suelo, por medio de retroexcavadoras de gran porte y la excavación en roca, mediante la utilización de explosivos, los cuales se introducen en perforaciones realizadas para el efecto en la roca a ser removida.
La cantidad de explosivos y el proceso de detonación son determinados y diseñados previamente a los efectos de producir voladuras controladas de la roca para no afectar a las presas de tierra colindantes a la zona de excavación en roca ni a las estructuras del vertedero del brazo Aña Cuá.
Entre el 17 de diciembre del 2020 y el 22 de febrero del 2021, se han realizado 35 voladuras. Todas las detonaciones de explosivos son controladas mediante sismógrafos, que miden las vibraciones producidas por las ondas expansivas, las cuales, hasta el momento, registran valores muy por debajo de los límites permitidos y exigidos en las especificaciones técnicas. De esta manera, se asegura que no se produzcan daños o alteraciones en las estructuras existentes, presa de tierra y vertedero.
A fin aprovechar gran parte del material resultante de los procesos de excavación, los materiales son clasificados según su tipo y calidad, y serán reutilizados en la obra.
A la fecha, se excavaron aproximadamente 708.000 m3 de suelo y se obtuvieron unos 70.000 m3 de roca, mediante la detonación de 13.300 Kg de explosivos en las 35 voladuras controladas realizadas.
La maquinización del Brazo Aña Cuá aprovechará un gasto de 1.500 m3/s vertido los 365 días del año por el Vertedero Aña Cuá, denominado caudal ecológico, para la producción de energía eléctrica.
La obra no generará ningún tipo de impacto medio ambiental ni social, teniendo en cuenta que no se producirán inundaciones, relocalizaciones; muy por el contrario, además de la producción de energía eléctrica, permitirá el traspaso de los peces desde aguas abajo del brazo Aña Cuá hacia el embalse y adicionalmente permitirá la ejecución de los trabajos de mantenimiento y reparaciones de la estructura del vertedero, actividad postergada en el tiempo debido a su funcionamiento ininterrumpido.