A días de dejar su cargo, el ministro de Hacienda Benigno López afirmó que, tras el impacto económico de la pandemia del la COVID-19, la reforma del gasto público es impostergable y debe ser llevada adelante.
Este proceso de reforma comprende una ley para modificar el servicio civil, que fue presentada semanas atrás al Congreso; además de una reforma de la ley de Compras Públicas, entre las principales.
“Creo que Paraguay tiene todas las herramientas para salir de esto (la crisis por la emergencia sanitaria), pero sin reforma no será posible”, afirmó.
Con la Ley de Emergencia, se habilitó una línea de crédito de US$ 1.600 millones como una medida a contrarrestar los efectos de la expansión del virus respiratorio. “Se prevía una caída enorme y desordenada de la economía” además de los efectos en el sistema de salud.
Recordó que Paraguay no tiene ahorros fiscales (un fondo soberano), pero sí una política macroeconómica sólida, y a eso se recurrió para adquirir el financiamiento de los US$ 1.600 millones.
“Ahora tenemos que nivelar. No podemos hablar de aumentos salariales ni el ritmo de inversiones públicas de los últimos años”, indicó. Agregó que, en su opinión, cualquier conversación de aumentos salariales debería ser postergada hasta al menos el año 2022.
El ministro agregó que tres reformas claves que deberían impulsarse corresponden al servicio civil, a las compras públicas y al sistema de pensiones, de forma a mejorar el gasto público.
El actual titular de Hacienda confirmó que dejará el cargo en la semana que comienza para postularse a una de las cuatro vicepresidencias del directorio del Banco Interamericano de Desarrollo (BID). Consultado sobre su posible reemplazo, el presidente Mario Abdo manifestó ayer sábado que se buscará un nuevo ministro de entre el equipo actual del Ministerio.