El tenista serbio Novak Djokovic se quedó con la presea dorada tras vencer al español Carlos Alcaraz por 7-6 (3) y 7-6 (2) en la final olímpica de París, consiguiendo así la tan buscada primera medalla de oro de su carrera.
A partir de ahora, Djokovic puede jactarse de haber conseguido el título olímpico, logrado en su quinto intento tras tres semifinales perdidas y un bronce en Pekín, que había quedado como un sabor agridulce en medio de tantos triunfos.
A los 37 años, y con pronósticos de declive en su carrera, el serbio buscaba redimir su palmarés y alcanzar el éxito que le había eludido. En el prestigioso escenario de la pista central de Roland Garros, enfrentando al español Carlos Alcaraz, considerado por muchos como el principal contendiente para su trono, Djokovic logró finalmente su objetivo.