Fluminense conquistó su primera Copa Conmebol Libertadores venciendo a Boca Juniors en el alargue por un marcador de 2-1.
La fiesta fue completa para el conjunto tricolor, que alzó el trofeo ante su hinchada en el estadio Maracaná de Río de Janeiro. Así también, el campeón se llevó como premio monetario 21 millones de dólares.
Luis Advíncula jugó los 90 minutos completos para el cuadro argentino, anotando un gol para empatar el partido, pero los goles de Germán Cano y John Kennedy aseguraron la victoria para el equipo brasileño.
Con esta victoria, Fluminense se convirtió en el onceavo equipo brasileño en ganar este torneo y obtiene su primer título continental, ya que en el año 2008 había perdido en la final ante Liga Deportiva Universitaria de Quito.