Los sanatorios privados reclaman la situación económica que atraviesa el sector tras atender a pacientes con Covid-19 derivados desde el sector público. La deuda requerida al Estado es por la suma de USD 43 millones.
Mediante el convenio público-privado fueron atendidos en los establecimientos privados 5.717 pacientes hasta agosto de este año, de los cuales 2072 fueron a UTI y 3.645 en sala de internación.
El monto total de lo facturado por la atención fue de G. 411.825 millones y hasta agosto del 2021 solo se cobró la suma de G. 107.119 millones, por lo que la deuda hasta el 31 de agosto es de G. 304.705 millones (US$ 43.591.651).
Con la declaración de emergencia sanitaria, los agremiados a la Asociación Paraguaya de Sanatorios y Hospitales Privados (APSHP) realizaron un esfuerzo enorme con inversiones de urgencia, la habilitación de camas de terapia adicionales y de internación normal, más equipos, más insumos, más medicamentos, más personal médico y de blanco. “Muchas veces nos quejamos que los pagos eran muy lentos. Nosotros crecimos responsablemente porque existía la garantía”, indicó Doria.
Desde el sector privado resaltaron que respondieron a la crisis de forma inmediata, con todo lo que tenían y sin condicionamientos, y gracias a ese esfuerzo, se salvaron miles de vidas, pero ese gran esfuerzo trajo consigo consecuencias. La deuda del Estado con el sector creció de manera exponencial y los recursos propios de los asociados se fueron acabando, lo que significó en muchos casos asumir deudas con proveedores y médicos, ya que no podían permitir que falten insumos y personal de blanco en ese momento.
TERCERA OLA DE VARIANTE DELTA
A su vez, Zarza dijo que la participación del sector privado fue clave para evitar caer en situaciones dramáticas con pacientes muertos en las calles, hecho que no se dio en nuestro país, según recordó. Sin embargo, la falta de pagos dejó a los privados en una situación financiera severamente comprometida, dificultando la previsión en caso de tener que enfrentar una tercera ola. “Todos respiramos un poco, pero las autoridades informan que la variante delta vendrá y será una ola fuerte, también se habla de la variante Mu de Colombia”, agregó.
“Solicito enfáticamente al Gobierno que cumpla con los privados, nosotros hemos cumplidos a cabalidad, nos pusimos la camiseta, pedimos que se salde la cuenta para estar listos para enfrentar a la amenaza”, indicó por último.