Nueve miembros del Clan Rotela, incluido su líder Armando Javier Rotela, han sido acusados de varios delitos tras el operativo Veneratio, que buscó retomar el control de la cárcel de Tacumbú. Los fiscales Fátima Girala y Marcial Machado describieron cómo el clan dominaba el penal y operaba en Asunción, involucrándose en el tráfico de drogas y el sicariato.
Durante la intervención del 18 de diciembre de 2023, los miembros del clan resistieron con armas y explosivos, resultando en la muerte del suboficial Martín Mendoza.
Los acusados enfrentan cargos por motín, transgresión a la ley de armas y asociación criminal. La fiscalía destaca que el grupo utilizaba símbolos y tácticas organizativas para mantener su control y que muchos internos se unían al clan a cambio de protección y drogas.
El operativo dejó a varios policías heridos y reveló la capacidad del clan para resistir las intervenciones de seguridad. La acusación también menciona que Rotela tomó como rehén a una mujer embarazada durante el enfrentamiento antes de rendirse.
