La Cámara de Diputados decidió archivar un proyecto de ley que proponía expropiar un terreno en el barrio San Vicente para convertirlo en un parque urbano.
Esta decisión pone en riesgo la conservación de 117 árboles en la zona y permite el avance de proyectos privados, como la construcción de un supermercado.
El proyecto, impulsado por los diputados Johanna Ortega y José Ramón Rodríguez, buscaba proteger el bosque y evitar su tala.
Aunque inicialmente fue aprobado en Diputados, fue rechazado en el Senado y finalmente archivado, lo que impide su reexamen durante un año.
Los vecinos, que consideran el bosque un espacio esencial para el ecosistema, expresaron su descontento y planean continuar luchando por su preservación a través de acciones legales y campañas de concienciación.