El presidente Santiago Peña devolvió con varias modificaciones el proyecto de ley que busca establecer control y transparencia en las organizaciones sin fines de lucro, tras las críticas de oenegés que lo consideran un instrumento de acoso, por sus posibles implicaciones antidemocráticas.
Las modificaciones incluyen la exclusión de organismos internacionales y partidos políticos del control, así como la eliminación de sanciones severas propuestas anteriormente.
El nuevo texto establece que el Estado garantizará la libre asociación y reduce las multas y sanciones a inhabilitaciones más razonables.
La Cámara de Diputados discutirá el proyecto mañana martes, ya que se acerca la fecha límite para su aprobación.
Los legisladores buscan evitar que se apruebe la versión original del Senado, que muchos consideran problemática, según explicó el diputado colorado cartista, Hugo Meza.