Las dos activistas del grupo medioambiental “Just stop oil” que tiraron una sopa de tomates al cuadro de Los Girasoles de Vincent Van Gogh, fueron acusadas ayer de “daño criminal” por el tribunal del sur de Londres.
Las dos activistas medioambientales, Anna Holland y Phoebe Plummer, ambas de 22 años, habían dañado el marco de la obra postimpresionista del pintor holandés Vincent Van Gogh, en la National Gallery de Londres, Reino Unido, en el año 2022. Con dos latas de sopa de tomates arrojadas al cuadro hicieron su protesta mientras vestían camisetas con la inscripción de “Just stop oil”, y preguntando: “¿Qué vale más, el arte o la vida? ¿Vale más que la comida o que la justicia?”.
Un jurado popular declaró culpables a las activistas este jueves por aquel incidente, sin embargo ambas negaron los cargos frente a varios compañeros de “Just stop oil” que estuvieron presentes en el juicio durante el veredicto.
La semana pasada el juez Cristopher Hehir anunció a las activistas que quedarán en libertad bajo fianza hasta la lectura de la sentencia, prevista para el 27 de septiembre. Sus condiciones bajo fianza establecen que no deben llevar pegamento, pintura o cualquier sustancia adhesiva en un lugar público y tienen prohibido visitar cualquier galería o museo.
El ataque a la célebre obra de Van Gogh fue el segundo que “Just stop oil” realizó como protesta en la National Gallery. Meses antes, otros dos activistas pegaron sus cuerpos a “La carreta de heno”, del pintor inglés John Constable.