A pesar de que la importación del producto fue autorizada hace ya tres semanas, los precios para el consumidor continúan en aumento, llegando hasta los G. 30.000 por kilogramo en algunos supermercados, superando incluso el precio de la mayoría de los cortes cárnicos.
A medida que la producción nacional de tomates continúa creciendo, no logra satisfacer toda la demanda local, mientras que el precio va en aumento.
Así lo demuestra un cuadro de control de la Dirección de Comercialización del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), la misma detalla que una caja de 20 kg del tomate paraguayo cuesta al menos G. 300.000.
Al mismo tiempo, 18 kilogramos de tomate Santa Cruz nacional de segunda calidad cuestan G250.000
Por kilogramo, en el Mercado de Abasto y otros comercios mayoristas ronda los G. 15.000 y G. 20.000, mientras que para los consumidores finales incluso asciende a G. 28.000 en algunos sitios.
Esto no solo es un problema para la economía de los paraguayos, sino que también preocupa a los empresarios, porque cada año se espera que los productos locales sean menos que los importados.
Los productores paraguayos alinean sus precios con los costos de otros países para fijar el monto en consecuencia. Solicitan la asistencia técnica del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), para buscar una solución al difícil momento por el que están atravesando.