Los recientes fenómenos climáticos han afectado la producción frutihortícola, impactando temporalmente en los precios de productos básicos como el tomate. Sin embargo, expertos aseguran que la inflación está bajo control.
El Banco Central del Paraguay ha mantenido su tasa referencial en 6% por tercer mes consecutivo. Analistas como Wildo González explican que, a pesar de los desafíos climáticos, la economía paraguaya demuestra suficiente fortaleza para mantener un equilibrio.
Explicó que existen varias condicionantes, como ser que la producción de hortalizas requiere de mucha tecnología, asistencia técnica y conocimiento, que es lo que los productores de la agricultura familiar no tienen, lo que deriva a la vez en la falta de interés en invertir en grandes estructuras, por el riesgo de no encontrar mercado.
González destaca que el crecimiento económico basado en el consumo privado y la inversión agregada continuará, a pesar de los bajos precios de exportación de la reciente cosecha.