Mariángela Guidita Abdala Carísimo y Giselle Ferrer, imputadas por violación de la cuarentena sanitaria, perturbación de la paz pública y daño a cosas de interés común, están sindicadas como dos de las tres mujeres que quemaron una bandera paraguaya y pintaron grafitis en el Panteón Nacional de los Héroes en setiembre de 2020, en una protesta por el asesinato de dos niñas en un enfrentamiento de las fuerzas del orden con el EPP. Ahora, el juez garantías Miguel Palacios remitió a la Argentina la orden de detención con fines de extradición de las mujeres.
Los agentes fiscales Fabián Centurión y Ángel Ramírez fueron quienes iniciaron la investigación por los daños ocasionados al Panteón Nacional de los Héroes, y solicitaron la orden de captura internacional con fines de extradición contra las tres jóvenes imputadas, que finalmente ahora fue remitida a la Argentina por el juez de garantías Miguel Palacios. La orden de detención con fines de extradición es dirigida a Mariángela Guidita Abdala Carísimo y Giselle Ferrer.
Tanto Abdala como Ferrer sostienen que recibieron asilo político y que ni con órdenes de captura las traerían de vuelta al país. Sin embargo, autoridades del vecino país no confirmaron dicha información.
Por otra parte, el embajador paraguayo en Buenos Aires César Vera manifestó que desconocía si Abdala Carísimo y Ferrer se habían acogido a algún refugio diplomático en el vecino país y anunció que se investigaría.
En el marco de la Ley 5621/16 de Protección al Patrimonio Cultural, se prevén penas de hasta 10 años de cárcel para quienes atenten contra bienes de interés público, por lo cual los agentes intervinientes solicitaron medidas de prisión preventiva para las imputadas.
