Tras una reunión, el ministro del Interior Arnaldo Giuzzio y el comandante de la Policía Francisco Resquín acordaron trasladar de momento los controles policiales que se hacen en las rutas a los puestos de peaje del país, con el objetivo de desarticular posibles casos de extorsión a ciudadanos.
“El planteamiento es el levantamiento de esas barreras de control aleatorias. No más barreras genéricas, sino específicas, de acuerdo al Código Procesal Penal, dice que ese tipo de procediemientos debe hacerse bajo comunicación del Ministerio Publico, pero en casos específicos”, sostuvo Giuzzio.
En ese sentido, dijo que se levantarán las barreras policiales, de forma progresiva, iniciándose con la Ruta PY02. En este sentido, sostuvo que incorporarán tecnología e innovación para generar un control estricto y transparente.
En cuanto a las denuncias de policías, el titular de la cartera de seguridad comentó: “La corrupción corroe, corroe los cimientos de la institución, inclusive desde el respeto del superior al subordinado y del subordinado al superior porque desde el momento en que el subordinado sabe que su jefe es corrupto le pierde el respeto”, reflexionó.