La Municipalidad de Coronel Oviedo destruyó ayer 10 máquinas tragamonedas que fueron incautadas de dos locales ubicados cerca de centros educativos y en áreas de la ciudad donde están prohibidas.
Los aparatos fueron aplastados frente a los encargados de los locales por disposición de la jueza de faltas Liliana Uldera y el dinero incautado de las máquinas, G. 2.700.000 en monedas, será donado a comedores de la ciudad.
Durante el proceso de retiro, los funcionarios municipales fueron agredidos por los propietarios de los locales, sufriendo rasguños y mordidas.
Cabe resaltar que el presidente de la República, Santiago Peña, había firmado un decreto para regular las medidas de protección a los menores de edad en relación a las influencias de las máquinas tragamonedas.