La Policía Nacional detuvo esta mañana a Antonio Araujo, ciudadano brasileño de 48 años de edad que se desempeñaba como pastor evangélico en la localidad de Santa Rita.
El mismo estaba siendo buscado en su país por un caso de abuso sexual en niños y vivía en Paraguay utilizando una identificación falsa.
La Policía brasileña alertó a las autoridades paraguayas sobre la presencia de Araujo en el país, lo que llevó a su detención en un operativo encabezado por el fiscal Alberto Torres.
Después de su detención, se realizaron los trámites necesarios y fue expulsado del país, siendo entregado a las autoridades brasileñas en Foz de Iguazú.
Según los informes, Araujo ya había sido condenado a 32 años de prisión en Brasil por el delito de abuso sexual, que presuntamente cometió en el estado de Paraná.