El senador Jorge Querey, miembro de la Comisión de Derechos Humanos, visitó este martes la comunidad indígena Loma Piro’y, ubicada en el distrito de Raúl Arsenio Oviedo, en el Departamento de Caaguazú, con el objetivo de constatar el ataque perpetrado por 30 civiles armados, supuestamente contratados por empresarios exportadores de soja, de acuerdo con las denuncias de los afectados.
El legislador relató que el asentamiento en cuestión está compuesto por unas 40 familias, integradas por numerosas mujeres y niños, cuyas tierras ancestrales están siendo usurpadas bajo un ropaje judicial, con serios indicios de irregularidad e ilegalidad.
Asimismo, mencionó que en dicho ataque los civiles armados procedieron también a la quema de precarias viviendas y a la agresión física, que derivó en dos heridos entre ellos, inclusive, niños indígenas que resultaron con fracturas en los brazos.
El legislador agregó que pudo constatar cómo las plantaciones de soja han cubierto el cementerio de este pueblo indígena y que durante el recorrido pudo observar un retén de unos 15 civiles armados en un camino público, en el trayecto a la comunidad indígena.
Remarcó que ya existen dos denuncias sobre esta situación ante la Fiscalía, donde no se tuvo ninguna respuesta e informó que realizaría una tercera denuncia, dejando constancia de lo que pudo observar. También recordó que legalmente los únicos organismos con la facultad para el ejercicio de la fuerza son las fuerzas policiales o militares.
Finalmente, anunció que se realizará un relatorio detallado de toda la situación constatada y que dicho informe será elevado tanto al Poder Legislativo como a otros organismos encargados de documentar los atropellos que sufren los pueblos indígenas en nuestro país.
La comitiva del legislador estuvo integrada por personal técnico de la Comisión de Derechos Humanos y de la Comisión de Pueblos Indígenas de la Cámara Alta.