Un violador serial identificado como Luis Héctor Morínigo Cantero, de nacionalidad argentina, fue liberado de la Penitenciaría Nacional de Tacumbú, donde debía cumplir hasta el año 2040 la última de sus tres condenas por hechos punibles contra la autonomía sexual de varias personas en la ciudad de Itá.
La jueza penal de Central, Silvana Luraghi, quien estaba a cargo del caso, emplazó ayer miércoles al penal para obtener un informe sobre las circunstancias de la liberación del recluso.
“El Ministerio Público se va a abocar también a la investigación para ver si se configura o no en un hecho punible porque se trata de un interno que recién en 2040 tenía que salir en libertad”, dijo la magistrada, quien abrió un sumario administrativo contra los funcionarios penitenciarios que habrían liberado al argentino, quien se presentó por última vez en una audiencia el pasado 24 de marzo.
“Mi juzgado ya se encuentra abocado para librar la orden de captura correspondiente, tanto nacional como internacional, para poder recapturar a esta persona” afirmó la magistrada, remarcando que el liberado todavía necesita “tratamiento psicológico y psiquiátrico”.
Según los antecedentes, el argentino habría abusado sexualmente de al menos 30 mujeres y 1 hombre. Los ataques ocurrían por lo general en horas de la madrugada, en inmediaciones del barrio San Cayetano de Itá, cuando sus víctimas se disponían a llegar a sus lugares de trabajo. El condenado utilizaba un arma de juguete para amenazar a las víctimas y luego someterlas sexualmente en un lugar oscuro.