El Dr. Guillermo Sequera, titular de Vigilancia de la Salud, declaró que la festividad de la Virgen de Caacupé es un evento que tiene sus riesgos, pero que el espíritu tampoco es prohibir todo para controlar la pandemia.
Agregó que aún se está evaluando la situación. “Todavía tenemos un mes para ello”, dijo. Reveló que, si la situación epidemiológica no permite la realización del evento masivo, se procederá a suspender la peregrinación hasta la Basílica. “El Obispo entiende esto”, señaló Sequera.
El epidemiólogo expresó que a partir de ahora, “cada domingo de noviembre será un examen para Caacupé”. Indicó que si la gente no respeta los protocolos y no hay capacidad de control será un riesgo para llevar a cabo el encuentro en la Villa Serrana y es lo que definirá el desarrollo de la celebración.
“Si vemos que en las misas previas a Caacupé no se cumplen los protocolos, va a ser un signo que el 8 de diciembre no vamos a poder controlar. Si las condiciones no están dadas, se va a suspender”, advirtió Guillermo Sequera y agregó: “La discusión está abierta, esto aún no está definido”.