Investigadores y fiscales de Colombia a cargo de la investigación del asesinato del fiscal Marcelo Pecci, denunciaron que habrían recibido amenazas de muerte por parte de uno de los detenidos por el caso, Andrés Felipe Pérez Hoyos, quien confesó que junto con su hermano Ramón Emilio, financiaron el atentado por más de 1.500 millones de pesos.
Pérez Hoyos habría dicho a los investigadores que jamás delatará a los jefes de la organización criminal que ordenó el asesinato de Pecci, sin importar que tenga que estar “15 o 20 años en la cárcel”.
Además, les dijo que los criminales tienen datos sobre la ubicación de sus viviendas, sus hijos, los domicilios de sus familiares y los trayectos de sus vehículos.
Los fiscales también habrían recibido la información de que la organización busca liquidar a Francisco Luis Correa Galeano, sindicado como “cerebro” del crimen y el principal testigo del caso.
Pérez Hoyos, quien fue capturado en el barrio El Porvenir de Rionegro, inicialmente había mostrado arrepentimiento e incluso llegó a pedir disculpas a la familia de Pecci.
