José Carlos Martín Camperchioli, presidente del Servicio Nacional de Calidad y Salud Animal (Senacsa), anunció ayer que la institución estableció la alerta máxima de bioseguridad ante el posible ingreso de la influenza aviar en Paraguay, por lo que preparan un plan de contingencia.
La influenza aviar es una enfermedad viral, infecciosa y patógena. Afecta a las silvestres y domésticas, es altamente transmisible y se caracteriza por su alta tasa de mortalidad, lo que genera un golpe importante en la cadena de producción y abastecimiento avícola, así como en el comercio internacional.
Para evitar el ingreso de la enfermedad a nivel local, Senacsa insta a la ciudadanía y especialmente a los productores de aves, a reportar lo antes posible cualquier detección de mortandad de aves migratorias, acuáticas, marinas o rapaces, que presenten síntomas que incluyen depresión, incoordinación, temblores, problemas respiratorios, diarrea y edema facial.
También solicitan informar inmediatamente sobre la mortandad en aves de corral que presenten sintomatologías como tos, jadeo, secreción nasal, temblores, movimientos circulares y tortícolis.
Hasta el momento, se confirmaron brotes en México, Colombia, Ecuador, Venezuela, Perú y Chile, así como en los territorios de Canadá y Estados Unidos.
