El presidente brasileño, Jair Bolsonaro, se abstuvo de reconocer la victoria de su rival izquierdista, Luiz Inácio Lula da Silva, y en su lugar usó sus primeras declaraciones públicas para agradecer a sus simpatizantes e instar a “respetar la Constitución”. También describió un “sentimiento de injusticia” respecto al proceso electoral para justificar las protestas.
En un discurso que duró poco más de dos minutos, el mandatario saliente comenzó agradeciendo a los más de 58 millones de brasileños que votaron por él y expresó el “honor” que significa “ser el líder” de esas personas, y defender juntos los valores de su lema: “Dios, Patria y Familia”.
Bolsonaro también dijo que apoya las actuales protestas que llevan a cabo los camioneros, quienes han instalado bloqueos en distintas carreteras del país, siempre que no se tornen violentas. Tras culminar la conferencia, el jefe de gabinete, Ciro Nogueira, anunció que el jefe de Estado de Brasil lo había autorizado a comenzar el proceso de transición.