La División de Áreas Protegidas, dependiente de la Dirección de Coordinación de la Itaipú Binacional, promueve acciones concretas de conservación de especies forestales en sus áreas protegidas, a través del programa de “Biodiversidad de Nuestro Patrimonio”.
Los árboles tienen una importancia estratégica fundamental para las áreas protegidas de la entidad, desde el punto de vista ecológico y social. No solo se constituyen en una barrera natural para proteger el agua, materia prima en la generación de energía limpia y renovable; sino que también conforman los últimos remanentes de Bosque Atlántico del Alto Paraná (BAAPA), los cuales son una fuente de recursos renovables capaces de producir importantes beneficios y, sobre todo, bienestar por la conservación de la flora y fauna.
En las áreas protegidas se conserva una elevada diversidad de especies arbóreas, algunas de gran porte que superan los 35 metros de altura. Asimismo, algunos ejemplares de árboles se encuentran en peligro de extinción y otros están amenazados a nivel nacional e internacional. Algunas de esas especies son el tajy hu (Handroanthus heptaphyllus), peterevy (Cordia trichotoma), ka’i ka’y gua (Cariniana estrellensis), samu’u (Ceiba speciosa), cedro (Cedrela fissilis), incienso (Myrocarpus frondosus) y el yvyra pere (Apuleia leiocarpa).
Además de conservar uno de los últimos remanentes del BAAPA, desde hace décadas la División de Áreas Protegidas de la hidroeléctrica viene realizando estudios para determinar la distribución y la dinámica poblacional de las especies arbóreas en peligro, y en amenaza de extinción. Mediante estas investigaciones, se llegó a determinar que la composición de especies arbóreas varía entre las áreas protegidas.
Por ejemplo, el ka’i ka’y gua es una especie en peligro de extinción, que habita las reservas que se encuentran más al norte. De igual modo, se llegó a determinar la presencia de Arary (Calophyllum brasiliense) en el Refugio Biológico de Mbaracayú. Se trata de una especie en peligro de extinción y cuya distribución en el Paraguay es muy limitada. Para apoyar la conservación de las especies nativas de árboles, se recomienda averiguar el origen de la madera antes de la adquisición de los productos maderables.
Por consiguiente, la División de Áreas Protegidas de Itaipú insta a proteger nuestros bosques, adquiriendo maderas de origen legal, proveniente de reforestación, o de bosque nativo con manejo forestal sustentable.