Cecilia Pérez, ministra de Justicia, informó el traslado de 16 presos a otras cárceles, en razón de que se corría peligro de seguridad porque “no creen que exista el coronavirus”. Muchos de los reos dificultaron el trabajo de los médicos, en protesta a la suspensión de las visitas.
La ministra asume que los casos positivos de COVID-19 aumentaran en la penitenciaria de Tacumbú. Durante el día de ayer, fueron detectados los primeros cinco casos, que estaban en el pabellón Remar, destinado a la rehabilitación de adictos. Sin embargo, son 40 los pacientes apartados y sospechosos por presentar síntomas. Si bien aun no están los resultados de los test, Pérez dijo que “asumimos que todos tienen, porque todos tienen síntomas respiratorios” sostuvo.
Mencionó, también, que ningún funcionario de Tacumbú dio positivo. “Ningún trabajador del penal se reportó enfermo o con síntomas”, alegó, al tiempo que explicó que las personas con enfermedades de base fueron enviadas a sus casas.
Por ahora, las visitas están suspendidas por al menos dos semanas y se sospecha de otros 30 casos más. La ministra reconoció que aún no se pudo detectar cómo se produjeron estos contagios.
