La justicia argentina ordenó la incautación del avión venezolano-iraní retenido en el Aeropuerto Ezeiza, Buenos Aires, en el marco de la investigación por posibles vínculos con el terrorismo internacional. Aún es incierto el tiempo exacto de confiscación.
Según las autoridades, investigaran la aeronave para obtener más información sobre por qué los tripulantes, integrado por cinco iraníes y 14 venezolanos, decidió aterrizar en Buenos Aires. Uno de los pasajeros, el iraní Gholamreza Gashemi, tiene el mismo nombre que un miembro de las Fuerzas Quds, una división de los Cuerpos de la Guardia Revolucionaria Islámica, clasificada por Estados Unidos como una organización terrorista.
El polémico avión es un Boeing 747 Dreamliner de carga, perteneció a la empresa iraní Mahan Air y actualmente corresponde a Emtrasur, filial del Consorcio Venezolano de Industrias Aeronáuticas y Servicios Aéreos (Conviasa), empresas que están sancionadas por el Departamento del Tesoro de EE.UU.
